martes, 12 de agosto de 2014

24 HORAS DE TRIATLÓN SOLIDARIO EN FAVOR DE GERNA

Todo comenzó a las 12:00 del mediodía del sábado, estaba muy nervioso y tenía mucho miedo, me enfrentaba a algo desconocido para mi. Sin pensármelo dos veces me sumergí en las aguas del pantano y comencé a nadar. Detrás de mí vino Peio Ormazabal, nadador de aguas abiertas que se presto a nadar a mi lado y acompañarme en estas primeras horas.
Poco a poco fueron pasando los minutos, la primera hora se hizo un poco larga hasta que fui calentando, muy bien asesorado por Peio cada media hora hacíamos una pequeña parada para hidratarnos y comer algo. El peor momento fue entre la quinta y la sexta hora, el desgaste sicológico pasaba factura y me dolían los tendones de la mano izquierda, entonces hice caso de unos consejos del amigo Peio y poco a poco fui superando ese pequeño bache. Después de completar 21 kilómetros salía del agua con un gran subidon, había vencido la parte que mas miedo me daba del reto y con muy buenas sensaciones. La salida del agua fue impresionante, había muchísimo público en el embarcadero aplaudiéndome. Al salir del agua cambie de ropa y comí un buen plato de espaguetis, seguidamente acompañado por Miguel en los primeros 20 kilómetros fui camino de Mendigorria, después continúe con ligero viento en contra hacia Tafalla, al paso por Tafalla entro la noche que me acompañaría las siguientes seis horas por la Ribera Navarra. Bien escoltado por la furgoneta del equipo de apoyo fueron pasando las horas hasta completar las ocho horas y 203 kilómetros. No marche demasiado cómodo, mis brazos y mis hombros estaban muy resentidos de la natación y tenia muchas molestias al agarrar el manillar.
La ultima transición la hice en casa a eso de las 5:00 de la madrugada, comí algo sólido y comencé con el ultimo bloque de carrera a pie acompañado de José Luis de Burgos, juntos con mas pena que gloria dimos unas vueltas por la zona de la Ciudad Deportiva esperando a que amaneciera, el ritmo era muy lento, estaba muy cansado y tenia mucho sueño, fueron unas horas muy difíciles de superar. Ya camino de Pueyo y esperando a que saliera el sol me dormía de pie, no podía correr y caminaba, en un par de ocasiones el amigo José Luis me agarro para no salirme del camino. Al paso por Pueyo me fui recuperando y comencé de nuevo a correr, a ritmo lento fuimos haciendo camino. Al paso por Solchaga se unirían Josu Pagola y Jokin Aldaz que estuvieron corriendo a mi lado las siguientes tres horas. Cada vez el final estaba mas cerca y comenzaba a saborear la victoria. La última media hora se unirían un par de corredores de Unzue. A las 13:25 enfilábamos la última subida hacia Unzue donde me esperaban un grupo de niños que se unirían para hacer los últimos metros a mi lado.
La llegada fue espectacular, todo el pueblo animando y volcado, cohetes, la charanga, algo muy bonito para poner punto final a un gran reto.
Al final decidí variar un poco esas 24 horas y prolongarlas hasta las 25 horas y media, quería darle más valor y que las ocho horas de cada disciplina serian más reales y no contar así las lentas transiciones de una prueba de este tipo. Logrando así 21 kilómetros a nado, 203 kilómetros en bici y 61,4 kilómetros corriendo.
Ha sido una de las mayores satisfacciones deportivas de estos últimos años, ha merecido la pena tantas horas de entrenamiento, esfuerzo y sacrificio.
Con este reto he dado un paso mas en mi carrera deportiva, he experimentado sensaciones nuevas, aprendiendo a sufrir y trabajando la capacidad sicológica.
Agradecer el apoyo de Peio Ormazabal, fue de gran ayuda su compañía para terminar con éxito esas primeras ocho horas, también ese pedazo de equipo con José Luis de Burgos, Javier Ongay, Juantxo Pagola, Atilano y Txema Sesma que velaron por mi y estuvieron en todo momento a mi lado para que todo saliera bien.
También me gustaría agradecer su hospitalidad al Camping de Aritzaleku, a la escuela Navarra de Vela y a todos los voluntarios que nos apoyaron con la embarcación a pedales para el avituallamiento.
Por ultimo agradecer el apoyo de mi mujer Ivana y de toda la gente de GERNA, me he sentido muy apoyado y querido, sin olvidar al pueblo de Unzue, ese recibimiento y ese cariño no lo olvidare nunca.
Hoy marcho unos días de vacaciones con la familia a Asturias, allí pasaremos las dos próximas semanas, disfrutando de la familia, los amigos y cambiando de escenarios para mis entrenos.


Los números en el agua


Los números en bici


Los números corriendo


Foto de salida con el apoyo de GERNA 


Mucha gente animando en la salida


Allá vamos


Muy bien asistidos en el agua


Agua tranquila


Salida del agua


Un abrazo con Peio


Celebrando esas primeras ocho horas


El gran Juantxo tomando planos


Mucha oscuridad y soledad para las horas de bici


Amaneciendo camino de la Valdorba


Calor para las ultimas horas


Acompañado de Josu y Jokin


Al fondo la Peña Unzue


Con el amigo Ati


Últimos metros


Llegada


Al fin


Caluroso recibimiento 


Gran apoyo de GERNA


Gran equipo de apoyo


Celebrando el triunfo

martes, 5 de agosto de 2014

SUBIDA AL PICO VELETA

El lunes después del disgusto del fin de semana pase visita médica con la sorpresa y la gran alegría de que las heridas de mi ojo izquierdo habían cerrado. Así pues me incorpore al trabajo ese mismo lunes y a los entrenamientos.
Esta semana pasada no he nadado apenas para que el ojo curara del todo, la he dedicado más a correr preparando la Subida al Veleta.
El sábado temprano cogí el coche rumbo a Madrid donde se unió el buen amigo Pablo Solinís, juntos nos desplazamos hasta Granada donde nos encontramos con los amigos Emilio Azuaga y José Luis Martínez. Por la tarde subimos en coche hasta la estación de ski y de paso vimos parte de la dura subida, un paseo por la preciosa Ciudad Andaluza y a cenar.
El domingo el despertador sonó temprano, a las 7:00 se daba la salida de la prueba, los primeros kilómetros transcurren por un parque junto a la Ciudad, después la aproximación hacia la subida y en el  kilómetro 10 comienza la ascensión que solamente se ve interrumpida por tres o cuatro pequeños descansillos.
Hasta el kilómetro 35 la hice toda corriendo, después alterne caminar con correr. La última parte del ascenso es durísima, una pista muy expuesta al viento y con duras rampas. Se junta la fatiga y la altitud, los últimos kilómetros son interminables.
Conseguí coronar en 5h 20m en el puesto 76 de la general.
Muy contento con el tiempo final, mas teniendo en cuenta que han sido unos meses donde no he podido preparar bien la prueba, este tipo de pruebas hay que prepararlas a conciencia.
Espero volver el próximo año conociendo la prueba y preparándola mejor.
Agradecer el apoyo y la hospitalidad de esta gran organización, sobre todo del gran Enrique Carmona al que tengo que dar la enhorabuena por ese 30 aniversario al frente de una de las pruebas más duras y bonitas del calendario nacional.
Este fin de semana intentare sacarme la espina de esas 24 horas de Triatlón en bloques de ocho horas, comenzare este sábado a las 12:00 en el Pantano de Alloz, seguidamente a eso de las 20:00 cogeré la bici para venir en busca de la zona media y completar esas ocho horas de pedaleo, la ultima transición la haré en Tafalla, me calzare las zapatilla a las 4:00 de la madrugada para subir hacia la Valdorba y completar esas ultimas ocho horas de carrera a pie en Unzue donde se celebran sus fiestas patronales.
Esperemos que todo salga bien y sacarme la espina de este reto que tanta ilusión me hace.



Los números 


La gráfica 


Mi dorsal 


Buenos amigos


Primeros kilómetros 


Primeras rampas de ascenso 


Con el amigo Emilio 


Reto conseguido 


En la cima con Emilio 


Junto al alma mater de esta gran prueba Enrique Carmona 


Cima del Veleta


Al fondo el Mulacen 


Allá abajo esta Granada

Cartel del reto de las 24 horas de Triatlón